martes, 10 de agosto de 2010

Mi filosofìa de vida es la apatìa

No es sólo cuestión de cicatrices,
es más como de ósmosis:
uno tiene tantos espacios vacíos afuera
que no le queda más que ir expulsando sentimientos
como esperando que se vuelvan personas.
Psicosomatizamos nuestras vidas
tanto que no las vivimos,
nos limitamos a padecerla.
Contamos tantas veces la misma anécdota,
decimos tantas veces las mismas palabras
que no queda de otra que resumirlas
hasta que un día todo se limita a que ya nada nos importa.
Ya todos nos conocen, ya todos nos saben,
Ya saben (sabemos) qué temas no tocar,
por cuáles lugares no pasar.
Nos acostumbramos finalmente,
asumimos tanto nuestras carencias
que nos olvidamos del pasado ya,
nuestra existencia puede reducirse
a una completa falta de recuerdos
expresada sólo por pensamientos.

1 comentario:

Wilmer Alfaro dijo...

Wuaauu Es Verdad todo lo que dices en esta entrada, duele pero así es nos acostumbramos a nuestra vidad que el día a día se convierte en rutina :-)